Con el avance de internet y la influencia que tiene en nuestras vidas, resulta inevitable que los emprendimientos continúen incrementando su presencia en el mundo web. El e-commerce o las tiendas online representan una oportunidad para hacer crecer tu proyecto. En este artículo recogemos algunas ventajas de incorporar el comercio electrónico en tu marca.
Pero antes… ¿Qué es y cómo funciona una tienda online?
Cuando hablamos de una tienda online, no nos referimos sólo a una página web. Su diseño y arquitectura está enfocada a un único objetivo: vender productos y agilizar el proceso de compra de los mismos.
En estas hay un catálogo con las características y precios de los objetos que ofrecemos. El proceso para comprar no es complicado: con solo unos clics registras tus pedidos en una base de datos. Un encargado será quien ponga en funcionamiento el proceso de envío a la dirección indicada. Y el producto estará en tu casa en pocas horas.
Por mencionar un ejemplo de cliente con el que hemos trabajado, la tienda online de Mi Capullito cuenta con una interfaz sencilla para ver sus diferentes productos literarios. Al momento de agregar el pedido al carrito e iniciar la compra, te pide tu correo electrónico, datos para realizar el envío y luego te da las opciones para pagar tu compra. Muy fácil, ¿no?
Beneficios de la tienda online
Una de las razones por las que los negocios optan por este tipo de herramientas, se debe al crecimiento del comercio electrónico. Según la Cámara Argentina de Comercio Electrónico, la actividad en el país creció un 73% en el primer trimestre del 2022 a diferencia del 2021. Con los cambios que han atravesado las empresas en los últimos años, debido en gran parte a la pandemia, se vuelve más evidente la necesidad de agilizar las ventas por fuera del espacio físico.
Otro motivo es que con la tienda online se eliminan las barreras geográficas. Dado a la infraestructura de estas páginas y las posibilidades de envío, el cliente puede comprar donde quiera y moviliza las demandas del local. Además, al no tener limitaciones hay una mayor amplitud en el nicho de mercado.
Asimismo, no hay límites de horario para que el usuario pueda realizar una acción desde cualquier dispositivo móvil u electrónico. Nuestro emprendimiento estará siempre abierto y el dueño puede administrar su tiempo según sus necesidades y comodidades.
Por otro lado, las ventajas de estar en la web permite generar tráfico y visibilizar el negocio. Los motores de búsqueda de google y las palabras clave, agilizan el alcance de los productos que buscamos vender. Ligado a este punto, las recomendaciones y comentarios del público sobre los mismos harán que la marca sea más visible para atraer a nuevos potenciales clientes. Lo cual hace que haya una mayor fidelización de la audiencia.
Entonces... ¿mi proyecto debería contar con una tienda online?
Creemos que cada caso es particular y lo ideal siempre es analizar en qué punto se encuentra tu negocio. Para ello, recomendamos realizar una clínica personalizada (consultoría) a través de la cual llegar a un diagnóstico inicial. Luego, tomar la decisión si es el momento oportuno.
Porque, como hemos visto a lo largo de esta nota –si se cuenta con la estructura y predisposición necesarias– tener una tienda online presenta un gran abanico de ventajas y metas que son alcanzables:
- Generar tráfico y visibilidad del negocio.
- Diferencia importante en gastos e infraestructura respecto a un local físico.
- Feedback y creación de comunidad.
- Mayor posibilidad de fidelización
- Enviar y recibir el producto o servicio donde el cliente lo solicite
- Cada vez más posibilidades para lograr comodidad en cambios y devoluciones
Como conclusión, solo nos queda mencionar que Internet funciona como una gran herramienta de oportunidades de comercialización y debemos aprovechar aquello que nos brinda. Y tu negocio, ¿está preparado para dar el siguiente paso hacia el mundo digital?
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